Son la actual aristocracia de los vinos navarros. Sólo las mejores añadas y los pagos más escogidos serán su cuna. Las variedades empleadas son las mismas que para los de crianza, muchas veces incrementadas con el Graciano. Los tintos de reserva tienen un mínimo de tres años (de los cuales, uno como mínimo fue en barrica) y los gran reserva tienen un mínimo de cinco años (de los cuales, dieciocho meses como mínimo fueron en barrica). Poseen un bello color cereza-rubí, con bonitos tonos teja, limpios y brillantes. Su nariz es compleja, rica en matices especiados, buenas maderas y fondo frutal que se mantiene con el paso del tiempo. La boca, pulida pero amplia y carnosa. Pero como Navarra es una denominación dinámica, también acoge actualmente una gran selección de vinos de alta gama, lo que se ha dado en llamar “Iconos o Vinos de alta expresión”: frutosos, concentrados, expresivos y maravillosamente complejos. Todos ellos son claramente los grandes protagonistas de nuestra mesa, acompañando la caza y los guisos más sutiles y elaborados.
Tesorotoro
Vino Tinto
Reserva
750 ml
14% vol
Variedad:
Cabernet Sauvignon & Tempranillo & Garnacha
Cata
Color granate brillante con tonos violetas. Sabor frutal con toques de caramelo toffee y palisandro. Vino con gran estructura, untuoso y muy largo en boca.
Características
12 meses en barrica de roble Francés, y posterior crianza 12 meses en botella.